Verdura legal.

10 AM:

-          Buen día, te puedo hacer un pedido?

-          Si, dígame señorita.

-          Serían 4 manzanas, tenes arenosas? Así las prefiero.

-          Espéreme que anoto señorita.

-          Pelones y duraznos, que están más dulces?

-          Los dos están muy jugosos, señorita.

-          Y cuanto está el kilo de cada uno?

-          Lo mismo cuestan señorita.

-          Dos y dos agregá..

-          Algo más señorita? Hay choclos dulces, buenos, buenos. Y tomates frescos, frescos.

-          Una planta de lechuga.

-          De cual señorita?

-          Cualquiera que esté fresca, te dejo elegirla.

-          Muy bien señorita, en media hora se lo llevo, está bien?

-          Muy bien, gracias. Te pago con 50.

3PM

-          Aquí tiene su pedido señorita.

-          Podrás sacar la lechuga de la cuenta? Ya no la necesito.

-          Si, como no señorita. Discúlpeme la demora, tuve que ir a inmigraciones.

Saber o no saber.

-       Tenías prisa?

-       La verdad que no.

-       Por qué acelerabas entonces?

-       Por llegar, no lo sé.

-       Te estabas perdiendo el paisaje.

-----++.

-       Va a llover hoy, mamá?

-       No sé Ignacio.

-       El señor de la radio dijo que llovía.

-       Ignacio, yo no sé todo lo que dicen en la radio. Si dicen que va a llover, lloverá.

-       Cuando sería?

-       A la tarde Ignacio.

-       A qué hora?

-       A las cinco Ignacio

-       Viste que sabías más que el señor de la radio!

-----++.

-       Como te fue en el examen?

-       No quiero ni  saber.

-       Más o menos decime.

-       No vas a querer saber.

Palabras más, palabras menos.

-       Esa escritora canadiense siempre quiso ser novelista.

-       Lo logró?

-        Como tuvo tres hijas solo podía dedicarse a escribir en los horarios de la siesta. Por eso solo escribió cuentos.

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-       Si me quedase cuadripléjico creo que me muero!

-       Yo no, me pondría a escribir!

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-       Por qué venís a este curso?

-       Pensé que, así como puedo empezar a jugar al tenis a esta edad, podría también empezar a escribir. Sé que escritora ya no seré.

-       A esa edad tenista no serás!

Encanto ilimitado.

Una nena de menos de cinco años viajaba con su mamá en el subterráneo. Tenía pecas en su nariz y unos ojos que lo observaba todo.

-       Por qué esos dos chicos van agarrados de la mano?

-       Porque se quieren.

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-       Abrí la puerta sin golpear ni pedir permiso, despacito. Y las vi… a las dos abrazadas. No entiendo por qué.

-       Como dormís con tu esposo cuando están felices? Abrazados, acurrucados, apretujados? Ellas lo mismo.

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-       Me invitó a salir, a tomar algo o al cine. Yo elegía. No supe que contestarle.

-       Le habrás dicho que si, no? Si te encanta!

-       Pero…que van a pensar si me ven?

-       Que estás enamorado.